¿Quién no recuerda sus vacaciones cuando aún era un niño? Dejar atrás los libros, los deberes, el despertador y la rutina. El nerviosismo y la curiosidad te sumían en un insomnio permanente fantaseando con los días interminables de castillos de arena en la playa o juegos entre el barro de la montaña. Las vacaciones de la infancia suelen generar unos recuerdos imborrables a pesar del paso de los años. Por eso, que mejor que invertirlas en un camping, donde tus hijos, aunque no se cuelguen la mochila ni carguen con apuntes o tablets, adquirirán grandes aprendizajes.
Te explicamos los beneficios de ir de camping con niños.
¡Vamos allá!
Ganar en autonomía
Explorar el mundo que les rodea sin más compañía que la de otros niños; vivir y ser dueños de sus propias aventuras; moverse con libertad por un nuevo entorno – sin sentirse perseguidos por la mirada intimidadora de los padres- e implicarse en la participación de tareas comunes como fregar los cacharros, comprar, o montar y desmontar la tienda… En un camping, al final de las vacaciones, los pequeños de la familia serán los que más habrán crecido. ¡Porque ir de camping con niños es ganar en responsabilidad, autonomía y autoestima!
Hacer nuevos amigos
Que en los campings se hace mucha más vida social que en cualquier otro tipo de alojamiento es algo indiscutible. La presencia de muchas familias y el estar casi siempre fuera de las habitaciones -ya sea en una tienda, bungalow, caravana…- les ayudará a vencer la timidez -en el caso de que la tengan- y a relacionarse con mayor facilidad. Además, es muy probable que algunos de estos nuevos amigos provengan de otras partes del mundo lo que fomenta el intercambio de experiencias y la sociabilidad.
Conectar con la naturaleza
Entornos de ensueño, bosques de gran riqueza paisajística y playas de postal. La mayoría de los camping de Cataluña está ubicados en plena naturaleza, ya sea a pie del mar o de la montaña, lo que permite que los niños dejen atrás el cemento, el humo y la contaminación del día a día y conecten con la naturaleza. Trepar por lo árboles, nadar en agua salada, o ensuciarse la manos con el barro de la tierra, ¡harán que su respeto y amor por la naturaleza se multiplique!
Si esto te parece poco, desde CampingCat podemos asegurarte que ir de camping con niños es una estupenda oportunidad para construir con ellos unos lazos más estrechos -esto te lo contamos en otro post- y a menudo suponen una ocasión única para educar en un ambiente sano y divertido. Por lo tanto, al final, lo importante de vivir unas vacaciones en familia es construir recuerdos imborrables. Como cuando no podíamos dormir de la emoción de pequeños…