Diez platos de la gastronomía catalana para chuparte los dedos

Las mejores recetas de Cataluña están cocinadas con productos de la tierra y servidos en algunos de los mejores restaurantes del mundo

En los fogones de Cataluña se cocina el mar y la montaña, el Mediterráneo y Los Pirineos, el verde y el azul propio de una comunidad con gran variedad de productos autóctonos. Y es que la gastronomía catalana es el calçot mojado en salsa romesco cuando los termómetros bajan, un arroz negro salpicado de sepia y marisco a orillas de una cala salvaje, o la explosión de sabor al romper el azúcar quemada de una crema catalana. 

La comida catalana está compuesta de sensaciones. Formada por las provincias de Lérida, Tarragona, Gerona y Barcelona, incluye carnes, pescados, verduras o arroz. Además, los platos de Cataluña se sirven como en ningún otro sitio. La comunidad atesora algunos de los  mejores restaurantes del mundo, como es el Celler de Can Roca (en Gerona). Especializado en cocina tradicional catalana cuenta con tres estrellas Michelín y fue considerado como el más sobresaliente del planeta en 2015 por la revista Restaurant Magazine.

Si quieres chuparte los dedos, no dejes de adentrarse en la gastronomía catalana a través de estos 10 platos: 

Los platos
  • Pan con tomate (también llamado “Pa amb tomaquet”): Puede parecer un simple pan tostado, pero te aseguramos que no lo es. El pan con tomate es el desayuno más sabroso que te puedes llegar a imaginar. Eso sí, para que sea auténtico, el tomate se debe de cortar por la mitad y frotar en la rebanada de pan. Luego, se añadirá aceite y sal, al gusto, y se acompañará de algún embutido como fuet o jamón serrano. Si se utiliza un pan de coca, ¡el resultado puede llegar a ser sensacional!
  • Escalibada: La tapa o el aperitivo más típico de la gastronomía catalana es una combinación de lo mejor de la dieta mediterránea. Su nombre proviene del verbo catalán escalivar que significa “asar al rescoldo”, y tiene su origen en las comunidades rurales. ¿Qué lleva?: berenjena, pimientos, tomates cocinados,  cebolla y anchoas… Su punto fuerte es su intenso sabor.
  • Calçots con salsa romesco: Cuando bajan las temperaturas no hay nada mejor que degustar unos buenos calçots con salsa romesco. Proveniente de Tarragona, es uno de los platos más característicos de la cocina catalana, siendo los más famosos los que se preparan en la población de Valls. El secreto está es cocinar la parrillada de calçots (una cebolla especial) en una barbacoa o chimenea y, por supuesto, no olvidar la salsa romesco, a base de tomates, pimientos y ajo asado.
  • Butifarra con mongetes: Un plato casero y contundente, perfecto para dar fuerza y energía, que siempre triunfa. Lleva salchicha, cocinada a la parrilla, y frijoles rosados o blancos. Este binomio de butifarra y judías es una excelente combinación para sentarse en la mesa al más puro estilo catalán.
  • Calamares a la romana: Los calamares a la romana en Cataluña son todo un emblema. Y es que no pueden faltar en ningún bar ni restaurante. Es la tapa más característica de la comunidad y se suele utilizar para acompañar a la paella. Ideal para tapear como si estuviéramos en casa.
  • Arroz negro: Delicioso como ningún otro plato, el arroz negro de la cocina catalana, se elabora con marisco y sepia -los culpables del color negro que adquiere la receta-. Hacerlo con todo su sabor es todo un arte culinario pero se puede conseguir a base de cebolla, ajo y tomate.
  • Pollo asado a la catalana: Su sencillez y facilidad a la hora de preparar no está para nada reñido con su gran gusto. Es un plato muy típico del fin de semana que se prepara con una salsa de verduras secas. Se puede degustar tanto en restaurantes como comprarlo -ya preparado- en supermercados y llevarlo a casa.
  • Crema catalana: Irse de Cataluña sin probar una crema catalana es casi un sacrilegio. El postre más solicitado por el turista, es una crema -entre medio de un flan y una natilla- envuelta en una capa de azúcar quemada. Usar una cuchara para romper este “manto” de azúcar es  ¡una experiencia gastronómica y sensorial sin igual!
  • Mel i mató: El queso y la miel conforman este postre delicioso y ligero. Es una receta clásica de la comida catalana que con una simple mezcla de estos dos productos consigue conquistar el paladar de cualquiera.
  • Braç de gitano: Postre especial para los amantes del chocolate. Está compuesto por una masa rellena de nata y/o chocolate a la que se le espolea una capa de azúcar por encima. Muy común en restaurantes y celebraciones especiales. 

 

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